La caída de los accidentes laborales obliga a ampliar los supuestos para donar órganos

Fuente: lasprovincias.com
Fecha: 26/01/2012

La donación de órganos lleva varios años estabilizada. Pero los trasplantes no pueden detenerse. Los especialistas lo saben y ya han invertido muchos esfuerzos en encontrar salidas para seguir ofreciendo posibilidades a quienes se encuentran a la espera de un órgano que les dé la vida. La Comunitat no es ajena a esa situación y sus especialistas han ido aplicando nuevas técnicas para afrontar unas cifras de donación que han descendido como consecuencia de la «caída de los accidentes de tráfico y los laborales».

El Hospital La Fe acaba de incorporar a su cartera el trasplante a partir de donante fallecido por parada cardíaca, lo que los expertos denominan donación en asistolia. Ello supone una novedad, ya que habitualmente las intervenciones se realizan a partir de órganos procedentes de fallecidos por muerte cerebral, si bien hace varios años ya fue necesario incorporar a los protocolos de actuación el trasplante entre vivos para afrontar las nuevas circunstancias de la donación.

El doctor Juan Galán señala que esa «caída» de donantes se ha observado como consecuencia del descenso «de los accidentes de tráfico y también de los laborales». El especialista no deja de puntualizar con insistencia que estos hechos son positivos, si bien muestran también esa otra cara. La Comunitat en 2007 registró 182 donaciones y el año pasado la cifra se situó en 166, si bien esta supuso un ligero aumento respecto a 2010 cuando los órganos disponibles fueron 154.

No se puede olvidar que las donaciones son una cuestión que afecta a todo el territorio nacional. El número de donantes que se registran en una determinada área geográfica no necesariamente se corresponde con el de trasplantes practicados, puesto que los órganos para una intervención pueden llegar o enviarse a cualquier punto de España donde se precisen. Además, en ocasiones, de un mismo donante se pueden derivar varias intervenciones trasplantadoras.

Cinco posibles donantes

Desde que el pasado mes de noviembre se implantara en La Fe el trasplante a partir de donación en asistolia, «La Fe ya ha recibido cinco alarmas» de posibles donantes, aunque no pudieron finalmente realizarse los trasplantes por razones como, entre otras, «contraindicaciones para los receptores» que los imposibilitaron.

Se trata de una técnica cuya seguridad «se ha demostrado al 100% para los trasplantes de riñón y pulmón. En el caso del hígado no siempre, en ciertas circunstancias». De esa manera aumenta la disponibilidad de órganos.

¿Qué diferencia hay entre la donación por muerte cerebral o por parada? El trasplante de donación en asistolia resulta «más complejo y requiere unos protocolos más estrictos», explica el doctor Galán. Es necesario contar con la colaboración de equipos SAMU y fuerzas de seguridad, puesto que el fallecimiento puede producirse por algún tipo de accidente u otra causa en un lugar alejado del centro sanitario y realizar el traslado en las condiciones y con las actuaciones adecuadas es imprescindible.

A las dificultades propias de la práctica médica se añaden las sociales que acompañan a estos fallecimientos repentinos. «Se trata de situaciones dramáticas para los familiares», que son quienes deben conceder la autorización.

El protocolo de La Fe se enmarca en la apuesta por extender la donación en asistolia por toda España que la Organización Nacional de trasplantes (ONT) dio a conocer el pasado mes de noviembre. La ONT adelantó en ese momento que el objetivo que se persigue es incrementar este tipo de donación para conseguir que alcance al 20% del total. El año pasado los donantes en asistolia representaron uno de cada 12, que supone el 8,2% del total, un resultado todavía alejado de la meta que quiere alcanzar la ONT.

El hecho de que el Hospital la Fe haya incorporado esta nueva técnica a su cartera de servicios no significa que se haya detenido la actividad trasplantadora a partir de otros donantes. Los últimos resultados lo demuestran.

El año pasado en este centro sanitario se practicaron 251 trasplantes a partir de muerte encefálica. De ellos la mayor cantidad fue de hígado, con 101 intervenciones. A estos siguieron los 71 trasplantes de riñón, 31 de corazón y 28 de pulmón. También se practicaron 11 de páncreas y ocho intervenciones renales en pacientes pediátricos.

A todas estas operaciones se añaden las cuatro de riñón que se practicaron entre vivos. El resultado supuso un descenso respecto a 2010 cuando fueron siete. Esa bajada, según señalaron recientemente desde el centro sanitario, se produjo como consecuencia del traslado. No obstante la dirección de La Fe apuntó que este año está previsto conseguir una intervención al mes.